domingo, 1 de octubre de 2017

Artículo Nº 112 de nuestro Segundo Libro

Escrito el año 2.010. 

Ruiz Bonilla Edgar. “Aguas subterráneas”. Artículo en el matutino “El Diario” del 4 de octubre de 2.010. Página 2 del primer cuerpo. La Paz-Bolivia-Sudamérica.

Aguas subterráneas

Autor: Ing. Edgar Ruiz Bonilla.
Ingeniero Geólogo con especialidades en Argentina, Francia y Alemania, ex Director a.i. del Servicio Geológico de Bolivia. Ex Catedrático de las carreras de Ingeniería Civil de la UMSA, Escuela Militar de Ingeniería y Univalle, Ingeniería Agronómica de la UMSA, ex Docente de la Escuela Pedro Domingo Murillo y ex Profesor del Colegio Don Bosco de La Paz. Investigador, Analista, Columnista y Escritor.
Edición y revisión: Egresado de Psicología William Marcelo Ruiz Botello y Egresado de Derecho Marwin Eduardo Ruiz Botello.

INTRODUCCIÓN: Los recursos hídricos son recursos naturales renovables y se refieren al estudio de las aguas superficiales y subterráneas. Bolivia cuenta con inmensos recursos hídricos.
Por una parte, los superficiales se originan en la Cordillera de los Andes y, por deshielo de los glaciares, originan arroyos, ríos, lagos y otros, los cuales se aprovechan, para la generación de energía hidroeléctrica y dotación de agua potable, como es el caso de la ciudad de La Paz y otras regiones del país. Sabemos muy bien, que en el futuro tendremos problemas con el “cambio climático”, por lo cual se recomienda la construcción de más represas.
Por otra parte, las aguas subterráneas son las que se encuentran en el interior de la tierra y que emanan en la superficie terrestre en forma de manantiales o vertientes, tal es el caso de la región del Silala, donde el agua de las diferentes vertientes fueron captadas en forma artificial por manos chilenas, para su aprovechamiento en Chile y, no se trata de ninguna manera de un río internacional como se pretende hacer creer.
Cabe recalcar, que el estudio de las aguas superficiales se llama Hidrología y el estudio de las aguas subterráneas se denomina Hidrogeología.
Para un mejor entendimiento, en primer lugar, analicemos en qué consiste el “ciclo hidrológico”, el cual puede ser resumido de la siguiente manera:
1. Evaporación: Por efecto de los rayos solares, las masas de agua de los ríos, lagos y mares se calientan y pasan del estado líquido al gaseoso en forma lenta produciéndose la evaporación.
2. Condensación: El agua evaporada (o vapor de agua) por ser más liviano que el aire se eleva formando gotas de agua constituyendo las nubes por condensación.
3. Precipitación: Las nubes de diferentes formas por efecto de los vientos son arrastrados a los continentes y, por variaciones de temperatura se produce la precipitación en forma de lluvia, granizo, nieve, etc.
4. Escorrentía: Gran parte del agua precipitada corre o escurre por la superficie terrestre en forma de aguas superficiales formando ríos, arroyos, lagos, etc.
5. Infiltración: Una cierta parte del agua precipitada, se insume en el interior de la tierra formando las aguas subterráneas, las cuales posteriormente salen a la superficie.
6. Evapotranspiración: Las aguas que caen sobre las plantas y animales no se infiltran y se evaporan produciéndose la evapotranspiración.
Actualmente por el “cambio climático”, este “ciclo hidrológico” ha sufrido variaciones, de manera tal, que existen grandes inundaciones y sequías.
ESTUDIOS TÉCNICOS: Como vimos anteriormente, las aguas existentes debajo la superficie constituyen las aguas subterráneas, los recursos hídricos subterráneos tienen un papel importante cuando se destinan al consumo humano o del ganado, al riego o para satisfacer objetivos industriales.
Los recursos hídricos subterráneos se almacenan en rocas porosas. En las rocas porosas, el vital elemento llena los poros y se presenta hasta en un 15 % de la roca, mientras que en las no porosas se presenta en las fracturas en forma más limitada. Para un mejor entender, si una roca es capaz de retener agua, hay que determinar su permeabilidad, la cual varía de buena a mala, siendo excelente en las arenas y gravas y no así en las arcillas.
Para la búsqueda de las aguas subterráneas, en cantidades adecuadas, es necesaria la utilización de información topográfica, mapas geológicos, datos climáticos, fotografías aéreas e imágenes de satélites y, si es posible, información hidrogeológica. La indagación geológica es de importancia en todas y cada una  de las etapas de las investigaciones. Posteriormente, es necesario, realizar mediciones geofísicas, con las cuales se llega a determinar las zonas favorables de almacenamiento de aguas. Más tarde, se efectúan las perforaciones que proveen la información concreta acerca del material atravesado y que conducen a la determinación exacta de los acuíferos, calculándose los pozos de producción que, realizadas las pruebas de bombeo y los análisis químicos correspondientes de la calidad del agua, nos servirán ya sea para el uso humano, del ganado, para el riego, etc. 
CONCLUSIONES Y SUGERENCIAS: De acuerdo a lo expuesto anteriormente, podemos arribar a las siguientes conclusiones y sugerencias:
- Se debe incrementar la investigación hidrogeológica en el país.
- Se debe concienciar una mayor confianza de la comunidad para el buen aprovechamiento de las aguas subterráneas, sobre todo en zonas deprimidas.
- Es necesario que los actuales y los futuros administradores tengan una visión más clara de lo que significa el recurso agua; por consiguiente, es necesario ampliar su conocimiento.
- En la región del Chaco es necesaria una exploración geofísica para determinar su potencial hidrogeológico, con el fin de realizar perforaciones para la obtención de aguas subterráneas. Cabe hacer notar, que no es “perforar por perforar”.
- En el caso del Silala, es necesaria la determinación de toda la cuenca y no seguir a ciegas el acuerdo con la República de Chile, ya que el mencionado acuerdo en una de sus cláusulas indica un caudal mínimo, lo que es imposible de mantener.
- En la década del 80 del siglo pasado, el ex Servicio Geológico de Bolivia (GEOBOL), conjuntamente con el PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo) realizó en el Altiplano Norte de nuestro país, un estudio de aguas subterráneas, habiendo determinado varias cuencas. De la misma manera, en el Valle de Cochabamba, efectuó un estudio similar, cuyos resultados deben servir como base para estudios posteriores.  
lanchamon@outlook.es
www.ensayosedgarruiz.blogspot.com


No hay comentarios:

Publicar un comentario